16 - DE SACRIFICADO A PRIVILEGIADO

Escrito el 09/08/2022
Tiempo para Soñar


“Dado que ustedes sobresalen en tantas maneras—en su fe, sus orado- res talentosos, su conocimiento, su entusiasmo y el amor que reciben de nosotros—quiero que también sobresalgan en este acto bondadoso de ofrendar.”
2° Corintios 8:7 (NTV)

Reconozco que con mi esposo ofrendamos, y no siempre se nos hace fácil. Pero cuando es el Espíritu de Dios mismo el que te confronta y te exhorta a ofrendar, cambia tu forma de ver las ofrendas. Ya no se trata de una carga u obligación, sino de disfrute; pues convertimos la acción de dar en una demostración de amor.

Dice Pablo que los corintios hacían todo bien entre ellos, y que sobresalían en muchas cosas. Sus comunidades crecían en conocimiento, fe, talentos... Sin embargo, aunque ofrendaban, era necesario que sobresalieran en tal acto bondadoso.

Seguramente había gente que ofrendaba con rapidez y el corazón co- rrecto. Imagino también que habría algunos quejosos, que pensaban que lo que hacían era suficiente, y creían que no debían dar más. Pero también es probable que estuvieran los que se sintieron confrontados a hacerlo más frecuentemente y con mayor intencionalidad. Este mismo desafío se nos plantea en la actualidad. Los corintios vivían una cultura de reino, pero necesitaban seguir entrenando, al igual que nosotros.

Ofrenda es dar sacrificadamente.
Ofrendar para mi hermano, en amor a Cristo y su obra, no debe ser una carga, sino un hermoso privilegio. ¿Por qué Pablo nos anima a sobresalir en la acción de ofrendar? Para que seamos testimonio vivo y agradable del amor y gracia. Para que el celo crezca y los demás anhelen recibir y aceptar a Jesús en sus vidas.

A vos, que sos perfeccionista en lo que te propones, Dios te dice: quiero que sobresalgas en amor y ofrendas. Que tremendo desafío tenemos por delante!

Para reflexionar:
Te animo a que en este día examines con que corazón estás ofrendan- do. Pedí en oración que el Señor te muestre a quien tenés que bende- cir hoy con una ofrenda.